La Mandarina es un proyecto residencial y vacacional para una familia joven. Trabajamos de manera muy cercana con sus ideas y para desarrollar un esquema formal que permitiera apreciar el bosque desde cualquier espacio interior de la casa. Por lo que la idea gira alrededor de una geometría de tres volúmenes conectada con pasillos y puentes y que se desplazan de manera natural sobre el terreno. El objetivo fue crear un recorrido cinemático lleno de momentos sorpresa, y en donde los volúmenes siempre enmarcaran las visuales hacia al bosque. La casa también invita a ser recorrida y observada desde el exterior. El beneficio de tener un terreno boscoso y de pendientes pronunciadas nos ofrece vistas enriquecedoras no solo desde la parte más baja del terreno, sino también desde la calle a través de las copas de los árboles. El uso de materiales regionales juega un papel relevante en el diseño, ya que usamos piedra local y ladrillo recocido pintado en color negro para mimetizar la casa con el contexto y la sombra del bosque. 

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La Mandarina is a residential and holiday project for a young family. We work very closely with their ideas and to develop a formal scheme that allows us to appreciate the forest from any interior space in the house. So the idea revolves around a three-volume geometry connected with corridors and bridges and that move naturally on the ground. The objective was to create a cinematic tour full of surprise moments, and where the volumes always frame the visuals towards the forest. The house also invites to be walked and observed from the outside. The benefit of having wooded terrain and steep slopes offers us enriching views not only from the lowest part of the terrain but also from the street through the treetops. The use of regional materials plays a relevant role in the design since we use local stone and annealed brick painted in black to blend the house with the context and shadow of the forest.